sábado, 1 de enero de 2011

Algo de Flora

Flora es la moto de mi amigo Alejandro, una R100 que ha preparado a su gusto, con mucho gusto además y que hace las delicias de los componentes del foro de bmwmotos.com .

El caso es que con los amortiguadores en casa y un ratillo, hoy que es un día de esos de transición entre el jet-lag y la nochevieja, nos hemos decidido a volver a montar los amortiguadores en la RS, con la sorpresa que Alejandro nos ha regalado unos tornillos de los de verdad, y unas pegatinas, y una camiseta y una foto de su Flora dedicada que ya ocupa un lugar privilegiado en el garaje claro.


Una vez hechas las presentaciones, vamos con la tarea, que últimamente es de plug and play, ya os aburriré con la resurrección de la K de Salva que ha decidido morirse en el banco de reparaciones.

Primero hemos quitado el escape izquierdo, que estorba para sacar el tornillo inferior del amortiguador, y a estas cosas me refiero cuando califico de fácil a la K, aquí debes desmontar cosas para hacer otras cosas, en la K casi nunca ocurre, lo que facilita la tarea. Quitamos el anterior amortiguador, que solo ha rodado un día mientras los otros se hacían el viaje a Asturias y ponemos este.



Los muy observadores apreciarán que los tornillos no son nuevos y es que son de cabeza allen del 7, y al principio no he encontrado llave de esta medida, con lo que  he montado los tornillos viejos, que le íbamos a hacer...
Mientras tanto Nacho me ayudaba a soltar el soporte de las maletas que también estorba para poner y quitar el amortiguador, menos mal que es flexible y a cuatro manos hemos podido abrirlo un poco para extraer y montar de nuevo, que sino hay que desmontar el guardabarros, el piloto trasero, el soporte de maletas y luego volver a montar todo, bendita K.


Se puede apreciar el esfuerzo para poner las tuercas por dentro de la chapa del chasis, y eso que tiene las manos más pequeñas. Es un decir, pues el peque ya tiene un tamaño considerable.


Cuando ya acababamos me he acordado de una caja de allen  que no había comprobado y mira por donde había una del 7, así que vuelta a empezar y a desmontar los tornillos viejos para ponerle estos tan bonitos.



Y gracias a la aguda vista de Nacho, separar con un método algo troglodita, ver rodeado de amarillo, el soporte de las maletas para que no roce con el amortiguador, observar margen en verde. El caso es que los originales también rozaban algo como se puede observar por el roce del cromado, flecha verde.


Y como ya estabamos liados le hemos cambiado el asiento biplaza por este mono-posto que le queda a la moto como un guante

Y que permite asímismo seguir usando las maletas tan feas como prácticas.


Espero darle unas vueltas a la moto este invierno, que aquí dentro no se pasa nada de frío.

No hay comentarios: